Sr Director.
Una inconsecuencia presenta la presidenta Bachelet, ya que, por un lado critica, en la mismísima Organización Panamericana de la Salud (OPS), en la capital de EE.UU. una medida de SUSTO, de MIEDO, que profirió su par brasileño, que recomendaba a los suyos, no viajar a Chile, especialmente a niños y adultos mayores, que asisten, mayormente, a los centros de esquí nacionales, por la porcina y para mas remate, la mandataria viaja, acto seguido, a México, país de origen de la pandemia, en donde ella desarrolla una extensa agenda, flanqueada, en todo momento, por su ministro de salud Álvaro Erazo; y aquí la distorsión, en la decisión de la autoridad sanitaria de suspender la festividad de LA VIRGEN DEL CARMEN DE LA TIRANA , que data del año 1535, en la que 1.500 vecinos, se preparan para recibir a mas de 100 mil visitas, causando por un lado una DEBACLE ECONÓMCA, tanto a personas como a empresas de transporte, residenciales, camping, comercio, restaurantes, todo el merchandising religioso, estampitas, escapularios, medallas, postales, etc. Y también anulando las expresiones de baile, que fieles ensayan todo el año sus coreografías, elaboran con gran cariño, rigurosidad y dedicación sus adornados y multicolores trajes y máscaras para la ocasión, que lucen con gran orgullo desde la entrada del pueblo hasta su iglesia, una vez al año, so pretexto de la eventual proliferación del virus de la influenza porcina.
Por un lado no le gusta que le espanten los turistas y por otro lado no deja que se haga una fiesta que atrae tanto a fieles y turistas nacionales y extranjeros. Pongámonos de acuerdo, sigamos una línea, no hay que tener doble discurso.
ARNALDO FONSECA LANDEROS
